Pica las cebollas, pimentones y las zanahorias en cubos. Maja los ajos.
En un recipiente colocar los codillos y las verduras juntas, incorpora el romero, laurel, la pimienta en granos , clavos de olor, vino tinto y vino el Oporto, remueve muy bien y pincha los codillos para que penetre los sabores a la carne.
Tápalo con papel film y llévalo a la nevera por 10 horas o más, para que se maceren.
Luego, saca de la preparación, sólo los codillos, secar un poco con papel de cocina, para sacar un poco la humedad, con la ayuda de un sartén colocar el aceite y sellar por ambos lados las piezas.
Al ver que estén doraditos, retira del fuego y resérvalos en un recipiente y sobre ese mismo aceite caliente, incluir todas las verduras, lo más escurridas posibles, que teníamos macerando, remover bien y dejar a fuego medio por espacio de 20 minutos o hasta que ya estén casi al dente. Corregir el aceite si es necesario.
Pasado éste tiempo colocar las piezas de codillo y remover enérgicamente para integrarlo con el sofrito, dejarlo actuar por unos minutos.
Seguidamente colocar los vinos que teníamos reservado, tapamos bien y lo dejamos a fuego lento, para que haga su proceso de estofado por 1 hora o hasta que los codillos estén suaves y se desprendan con facilidad del hueso.
Cuando ya estén listas, sacamos sólo las piezas de carne, y con la ayuda del procesador, colocamos el sofrito con el chocolate y batimos, luego en una olla derretimos la mantequilla y le incorporamos el sofrito y el chocolate, removemos bien, hasta que se obtenga una mezcla suave, espesita y aterciopelada.
Bañamos los codillos con la salsa y servimos caliente. Se puede acompañar con puré de patatas o fritas; ensaladas tricolor.